ENTREVISTA A MI TUTOR: Juan Jesús Pérez
Hola, me llamo Mari Carmen Puertas Espada y soy residente de primer año de Medicina Familiar y Comunitaria en el centro de salud de La Puebla de Cazalla. He decidido hacer la entrevista a mi tutor Juan Jesús Pérez para conocer su visión actual de la Medicina de Familia y sus inquietudes para afrontar la consulta día a día ya que admiro sus ganas de seguir aprendiendo y poniéndose a prueba constantemente como Médico.
Entrevista:
¿Por qué elegiste estudiar Medicina?
Estudié Medicina por vocación familiar y médicos cercanos.
¿Por qué elegiste la Medicina Familiar y Comunitaria?
Yo quería ser Médico, no específicamente de familia, estuve diez años en Urgencias que era mi verdadera vocación. Empecé en Primaria por comodidad y porque en ese momento me aportaba mejor calidad de vida.
¿Crees que el Médico de Familia está infravalorado?
Sí, tanto por los compañeros hospitalarios como por los pacientes. Pienso que el motivo principal es que los pacientes te ven a diario, y por eso al coger confianza con el médico, le quitan importancia. Además la palabra especialidad no la asocian al Médico de Familia,la asocian al Médico que se centra sólo en un área, por ejemplo el Médico que sabe de pulmón, entonces claro ese médico de esa materia va a saber más; como hoy en día vivimos en un mundo de exigencias, los pacientes quieren una segunda opinión de todo. Otra razón es que los pacientes ven al médico de familia a diario y esperan ver resultados inmediatos de las enfermedades que padecen que la mayoría de las veces son crónicas; alno ver los resultados, quieren una segunda opinión, pensando que el médico hospitalario le va a dar una solución más efectiva a su enfermedad.
¿Cómo piensas que se podría mejorar esta situación?
Con tiempo para la atención del paciente, formación del médico, educación sanitaria de la sociedad y mayor accesibilidad a pruebas complementarias.
¿Qué es lo que más te gusta de la Medicina de Familia?
El trato con el paciente y el seguimiento de las patologías. Conocemos de primera mano cómo comienza y como acaba una enfermedad y las repercusiones que tiene en la vida de esa persona.
¿Y lo que menos?
Los objetivos administrativos que siempre acaban siendo objetivos económicos, y que es una especialidad que a veces tiene que ocupar campos que no son los suyos tales como citologías, retinografías, pediatría etc. Hay cosas que hacemos por imposición por falta de profesionales y tiempo en otras especialidades, en resumen, por errores de la administración. No deberíamos ser el sumidero de la sanidad púbica.
¿Qué consejo le darías a un residente de Medicina de Familia?
Dos cosas:
No dejes de estudiar nunca; jamás debes pensar que ya lo tienes todo dominado.
Ejercita tu humanismo. Con esto se hace más beneficio que con toda la sapiencia. Lo que más necesitan los pacientes es que les des seguridad y sentirse atendidos.
¿Has entrado alguna vez en monotonía o pérdida de interés en tu trabajo?
No, gracias a los residentes me he obligado a mí mismo a mantenerme al día y a tener ganas de enseñar y de hacer que les guste la medicina.
